Hola!
Nos ha tocado la difícil tarea de exponer algunas de las
interesantes, características y complejas situaciones socio-culturales que se
han presentado en nuestro tiempo, La
Subjetividad de Genero, la Multiculturalidad, la Interculturalidad, y la nueva
sociedad que nos toca a bien vivir. A la vez afrontaremos estos problemas
usando como base fundamental el interesante ensayo de la Socióloga Peruana
Virginia Vargas, sobre: LAS DISPUTAS QUE TRAE LA GLOBALIZACION.
Forzando una síntesis, Vargas divide su ensayo en dos
partes, La Globalización como terreno en disputa y los nuevos marcos
en los horizontes de transformación. Su objetivo principal resulta ser a
nuestro modesto entender; transmitir como es que la transformación de la mirada
en un “horizonte de desconcierto e incertidumbre”, producto de la tecnología
del instante, resultaría beneficiosa,
siempre y cuando le exijamos al significado de globalización su pluralidad y
complejidad, contraatacando y arrancando las
cualidades mágicas propias de la propaganda de una promesa utópica de la modernidad centrípeta, que sin más lo que busca es un dominio deshumanizante a través de la alienación
mas bastarda. Y entendiendo que las nuevas subjetividades, son una
exigencia identitaria y (de genero por ejemplo) resultaran siendo reales, si
son alimentadas y solapadas en un contexto que va de lo Global (cosmopolita) a
lo Local. A su vez en lo más rico del ensayo, asume que esta retroalimentación
Global-Local, desarrolla un “tipo” en los grupos sociales, que E. Jelin
llama: “nuevos marcos interpretativos para la acción”, dicho tipo no es otra
cosa que un nuevo discurso (Foucault), aunque otra vez situándonos en lo Glocal
este discurso es un sujeto colectivo (propio de Lacan) en creación constante y por su característica multicultural y multidimensional resulta teniendo una
mayor base para re-combinar las reivindicaciones socio culturales (locales).
Vargas pone como ejemplo la equidad en la vida cotidiana exigida por
las feministas. En cualquier caso Jelin concluye diciendo
que la interacción de los marcos interpretativos(Bustelo y Lombardo se
dirigen dependiendo de la precisión para donde se espere se
transforme la mirada.
Así, la dicotomía del espacio Global – Local, termina siendo una especie de
nudo ideológico (una variedad de tramas) vulnerando el lugar físico, y
atrayendo para bien o para mal una interculturalidad que a su vez será nueva ya
que sus actores principales estarán enganchados a un sujeto en construcción e interpretación(en
la variedad de nudos), que tendrán como dinámica la sociedad en red, y como “porvenir”
el presente(Luis Apaza/YO/ trabaja una interesante tesis con esta base).
Decisiones, Decisiones
Virginia Vargas sostiene (con otras muchas referencias) que
esta es una revolución técnica(a la manera de Heiddegger), esta idea se cae de
madura, a pesar incluso de que la cantidad que cuenta con acceso a la redes-de Atenea
o de Aracne(según gustos)-, no son la mayoría, pero sí, esta parte representa a
la humanidad-sobre todo económicamente-, o simplemente la necesidad hará de esta
tecnología mun epísteme (RAE: Conjunto de conocimientos que
condicionan las formas de entender e interpretar el mundo en determinadas
épocas, ampliar en Foucault). Vargas sostiene que los cambios se originan
básicamente de la idea de instante(una red espacial según Landowsky), que nublan e
imposibilitan una clara visión de futuro próximo (esta podría ser también una
gran narrativa), acotando esto recordemos que podrían nacer otros grandes
discursos de los nuevos tiempos basados por ejemplo en la robótica y cibernética (la posibilidad de máxima de
colectivizarnos), o el discurso del fin de los tiempos, discursos que
englobarían las pretensiones humanas mas arquetípicas.
Un planteamiento demócrata como siempre tiene la debilidad
de sostenerse en la voluntad positiva y en la confianza pasiva de la toma de
decisiones… Entonces el nuevo sujeto construido “aparente”, nunca dejaría de
llevarse la mirada del otro, es decir la mirada de posesión y sometimiento,
buscando el triunfo y la realización, ¿No será acaso que la técnica del poder (de la voluntad
de poder…) se ha versatilizado tanto que ha sobrepasado cualquier
lucha humana? ¿No será que esta fragmentación de poder social ha sido
secuestrada por una visión mayor, que a su vez podría ser lo mistificado del
significante secuestrado del que habla Virginia Vargas citando a Masey(la vieja
aspiración biológica del cerebro global y del ser: de los bios unidos)? ¿Y esa
moderna lucha sin resolución por la nacionalidad identitaria, tendría idéntico fin
en la utopía, gracias a que “los indignados”, solo luchan por una simbolización
narcisista? Y, que finalmente la metafísica consumada del derecho ha
recogido(o recogerá) las voces para continuar disciplinándolas. Tal
vez sea la manera cultural del capitalismo: el
recurso de la cultura (Yudice) y que esta nueva sociedad es solo la
nueva mascara de la brutal expresión humana del imperialismo. Por
ejemplo una reivindicación de este tipo aceptaría la plastificación del ser
como “derecho” a sentirse objeto…/Rubén Blades- Plástico/
Pero de cualquier modo el andar de los humanos de alguna manera
estará en las manos, por primera vez quizás, realmente en nosotros, que este
pequeño-gran cabildo que proponen los nuevos marcos interpretativos serán los
de una mejor forma de solucionar algunas injusticias del presente, ya se ha
dicho que los discursos marginales (híbridos, raciales, feministas, etc) son
los que tienen las mejores armas para enfrentar los complejos nuevos
tiempos.
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